¡Comienza la aventura!
El comienzo de un nuevo curso está lleno de emociones, ya que todas las partes implicadas deben adaptarse a una nueva etapa.
Los niños y niñas entran en un entorno desconocido y separarse de su espacio familiar en el que se sienten seguros y protegidos no es una tarea fácil. Han de adaptarse a un nuevo espacio, a sus profes, a nuevos ritmos, a la vida en grupo, a nuevos sonidos, nuevos materiales….; su mundo crece y necesitan tiempo, paciencia y comprensión.
Es fundamental tener en cuenta que cada niño/a tiene su propio ritmo y respetarlo será la clave para una adaptación positiva.
Las familias también se enfrentan a un momento delicado, pues ellas tendrán un papel fundamental en este período. Durante esta etapa lo mejor será una despedida corta y una actitud de seguridad y confianza por parte del adulto. Nuestros peques tienen que aprender que aunque sus papás y mamás se marchen siempre van a volver a buscarlos. Por esto una rutina en la llegada y en la recogida sería la mejor opción; por ejemplo, que los entregue y los recoja la misma persona.
Es muy importante no trasladar a los peques nuestras inseguridades y angustias; una actitud positiva y relajada les ayudará mucho en este proceso.
Las maestras somos conscientes de que nuestros niños y niñas se enfrentan a un gran cambio y que el miedo a los extraños y la ansiedad por la separación de sus padres hacen de la adaptación un proceso complejo y delicado. Nosotras también mantendremos una actitud positiva , ofreceremos actividades atractivas, mucho afecto, comprensión y respeto.
La colaboración estrecha entre familia y escuela será un pilar fundamental durante la etapa de adaptación y a lo largo de su estancia en la escuela, así que no dudéis en preguntar cualquier duda o problema que pueda surgir. Ahora somos un equipo y nos ayudaremos en todo lo que podamos.
Aula Naranja